CORONAVIRUS

Descifrar la información genética del COVID 19

Científicos del CADIC, la UNTDF y el HRU trabajan mancomunadamente en la secuenciación del virus que produce el COVID 19 en Argentina.


El Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC – CONICET), la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF) y el Hospital Regional de Ushuaia (HRU), integran un equipo nacional que analiza la genética de las diferentes variables del virus que produce el COVID 19 circulantes en el país. El consorcio, liderado por la Dra. Mariana Viegas (CONICET-Hospital de Niños Dr. Ricardo Gutiérrez), está compuesto por grupos de investigación que colaboran con el análisis desde diversos puntos del país, para conocer la evolución, origen, circulación y las posibles mutaciones, que pueden afectar el diagnóstico, transmisión y virulencia de este nuevo coronavirus.
La participación local estará dada desde lo técnico y académico, por el grupo dirigido por el Dr. Santiago Ceballos, investigador del CONICET en el Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC) y docente-investigador del ICPA (UNTDF). El aspecto clínico y epidemiológico estará a cargo del equipo liderado por el Dr. Iván Gramundi, director del Laboratorio de Salud Pública de Tierra del Fuego del Hospital Regional Ushuaia, que además cuenta con el equipamiento necesario para realizar secuenciación de ADN a gran escala.
Santiago Ceballos (CADIC-UNTDF) explica algunos conceptos básicos del trabajo que realizan.

- La investigación se propone secuenciar el virus que produce el COVID 19, ¿esto qué significa?
SC- El ADN y el ARN son las sustancias químicas que se encuentran en todos los seres vivos y que contienen la información genética. Están compuestas por cuatro moléculas diferentes -nucleótidos- unidas linealmente, formando una secuencia que determina la información que contiene un determinado segmento. Secuenciar implica entonces a determinar el orden de esas cuatro moléculas básicas que componen un segmento o el genoma completo. Cabe destacar que el genoma de algunos virus, como es el caso del SARS-CoV-2, está compuesto por ARN.

- ¿Cuál es la diferencia entre ADN y ARN?
SC- Ambos son ácidos nucleicos, son moléculas muy similares que están compuestas básicamente por las mismas cuatro unidades estructurales con pequeñas diferencias químicas. En la mayoría de los organismos el ADN cumple la función de almacenar la información genética y transmitirla a la siguiente generación, mientras que el ARN cumple la función de mensajero durante la expresión de esta información. Por ejemplo, todas las células de nuestro cuerpo tienen la misma información genética, el mismo ADN, es decir el mismo genoma. Sin embargo una neurona es muy diferente a una célula del hígado por ejemplo. Esas diferencias están dadas por diferencias en la parte de la información genética que se expresa. En algunos virus como el coronavirus el genoma está compuesto de ARN y no de ADN y esto puede producir, por ejemplo, una mayor tasa de mutación.

- ¿Qué es el genoma?
SC- Es la secuencia completa de todo el ADN de un organismo. En el caso del ser humano está compuesto por 3000 millones de nucleótidos mientras que el del SARS-CoV-2 productor de COVID-19 está compuesto por 30.000 nucleótidos. Gracias a las nuevas tecnologías este proceso que antes podía llevar años y millones de dólares, en la actualidad se puede llevar a cabo en pocos días y por menos de 1000 dólares. El secuenciador de última generación con que cuenta el HRU tiene esa capacidad y desde el CADIC y la UNTDF aportaremos el conocimiento técnico, científico y de análisis bioinformático que permitirá aprovecharlo al máximo.

- Que circulen diferentes cepas, ¿implica que el mismo virus puede tener diferencias en su genoma?
SC- A veces hablamos de diferentes cepas porque fueron aisladas de diferentes pacientes y a veces porque pertenecen a diferentes linajes genéticos. En este caso una cepa refiere a un grupo de virus que derivan de un mismo virus original, o sea que comparten linaje. Las diferencias entre cepas podrían ser cambios puntuales en la secuencia del genoma que podrían, por ejemplo, incidir en la efectividad de una eventual vacuna. Evaluar eso es uno de los principales objetivos del proyecto.

- Se habla mucho de las posibilidades de mutación del virus e incluso este es uno de los puntos centrales del proyecto que están llevando a cabo ¿Qué se sabe al respecto?
SC- Los virus en general tienen una tasa de mutación relativamente alta pero por el momento, el SARS-CoV-2 no parece mutar demasiado rápido.

El proyecto.
El trabajo que estudiará la genómica de los virus SARS-CoV-2 productores de COVID-19 en Argentina, fue aprobado por la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) y durará un año.
La iniciativa incluirá la toma, procesamiento y análisis de muestras, así como el aporte de datos clínico-epidemiológicos de diversos puntos del país: Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires, Río Negro, La Pampa, Córdoba, Neuquén, Santa Fe y Tierra del Fuego, en principio, aunque pueden incluirse otros puntos de estudio con el correr del tiempo.

“Este proyecto abre muchas posibilidades que lo exceden. A escala nacional nos permite participar en este consorcio que se mantendría en el tiempo para responder de manera coordinada y federal a futuras problemáticas similares. En el ámbito local, nos posibilita poner en funcionamiento un equipo conformado por el CADIC, la UNTDF y el HRU y aportar al consorcio nacional. Al mismo tiempo nos habilitará a colaborar con los mejores virólogos y bioinformáticos y, de esta manera, aprender de ellos para mejorar nuestras propias capacidades”, concluye Ceballos.

Por Mariela López Cordero- CADIC